Venecia con mochila

Llegué a Venecia en el primer vuelo de la mañana desde Barcelona… la verdad un vuelo muy barato. Un buen tip para encontrar vuelos muuuuy baratos es tomar justamente el primer vuelo de la mañana (5 AM más o menos). Eso obviamente siempre significa dormir en el aeropuerto, pero vale la pena…

Llegué a las 7:30 de la mañana y me tomé el ATVO, un bus directo desde el aeropuerto que sale solo 8 euros. Te deja en la Gran Plaza Roma, a minutos del centro histórico de Venecia. Lo mejor que tiene este bus es que no hay que tomar ningún “Vaporeto”, como llaman a esos barquitos para ir de un sitio al otro.

Llegué a la Gran Plaza Roma a eso de las 8:30 AM. Llovía… caían pocas gotas, pero como llevaba mi computadora encima no me quería jugar a mojarla así que hice la inversión del día y me compré un paraguas. Fue muy gracioso porque supuestamente salía 5 euros, pero como se lo regateé y se dio cuenta que era argenta, me lo dejó a 4. Así que salí con mi paraguas a caminar la bella Venecia. En mi opinión, una “ciudad vidriera” que, con recorrerla unas pocas horas tan solo caminando, ya no hay nada más para hacer. Pero… ¡¡¡Vale muchísimo la pena!!! Es completamente bella.

¿Qué ver en Venecia en pocas horas?

Atracciones mochileras gratuitas: lo esencial

El Gran Canal de Venecia: siendo el más ancho, es sin dudas el más transitado de toda la ciudad. Recorre aproximadamente 4 kilómetros y divide a la isla en dos partes. En ambas orillas hay alrededor de 200 palacios pertenecientes a la antigua aristocracia veneciana, construidos sobre antiguos palafitos de madera. La mayoría de los turistas cruzan el gran canal en las famosas góndolas, lo que sale unos 80 euros si se toma una en forma privada. Obviamente no es mi caso: turismo 100% mochilero, las góndolas solo se miran desde la orilla.

Puente Rialto: Siendo el puente más famoso de la ciudad, durante mucho tiempo fue el único que conectaba ambos lados del Gran Canal. Se encuentra dividido en tres rampas, dos en los bordes y una central con negocios de artesanías y souvenires. Realmente muy bonito, ideal para obtener las mejores fotografías de las aguas venecianas.

Plaza San Marcos: Considerada la plaza más bella del mundo (bueno, en mi opinión no sé si es para tanto…), en ella se puede visitar la Torre del Reloj (de 1496), el Palacio de Procuratie Vecchie, el antiguo campanario de San Marcos (antiguo faro marinero) y la Catedral de San Marcos. La fachada de la Catedral es realmente increíble. Vale la pena detenerse a admirar su fachada llena de mosaicos y sus torres y agujas góticas… A uno de los lados de la plaza también se puede ver el Palacio Ducal (de 1442), el mejor ejemplo del gótico veneciano. La Plaza de San Marcos es la única con el nombre de “plaza”, a las demás se las llama “campo”.

Puente de los Suspiros: Desde la Plaza de San Marcos en dirección al embarcadero donde están la mayoría de las góndolas, frente al Palacio Ducal, se encuentra el famoso Puente de los Suspiros. Aunque seguro estés pensando ahora mismo su nombre seguro se debe a los suspiros que produce contemplarlo, no… ¡Error!. Construido en piedra blanca, comunicaba el antiguo tribunal con la prisión de la ciudad. El nombre “de los Suspiros” viene a raíz de que, cuando los prisioneros transitaban el puente hacia la prisión, se detenían a mirar por las ventanitas la bellísima vista de Venecia, suspirando que quizás no volverían a ver jamás la luz del sol.

Caminar Venecia es exquisito e increíble. Además de las grandes atracciones, sugiero andar por los rincones menos turísticos, iguales de bonitos o quizás más, por ser solitarios y súper fotografiables. Hay pequeños puentes bellísimos por todas partes y todas las construcciones son muy pintorescas.

Muy a mi estilo mochi-barato, no me quedé a pasar la noche allí, sino que me tomé un tren al Piamonte… una de las regiones más hermosas de Italia y no tan turísticas… la experiencia allí se la contamos en el próximo post.

Un dato bien mochila, la estación de trenes queda en el mismísimo centro histórico de Venecia, así que se puede llegar perfectamente caminando, sin gastar un solo euro.

Tips Venecia en pocas horas:

– Llevarse una vianda y mucha agua para evitar entrar a un restaurante, lo que está fuera de presupuesto.

– Hay baños públicos muy limpios y perfectamente cuidados en algunas zonas de la ciudad, así que si hay una urgencia son una opción… solo valen 1,50 euro.

– Solo pasar el día (o unas horas como hice yo), ya que no hay más para ver que los puentes y las no-calles de la ciudad, es decir, los canales.

– Disfrutar de las zonas no tan turísticas camino hacia la Plaza de San Marcos, mucho menos concurridas e igual de bellas y únicas.

– Si tenés tiempo, hacer un Free Walking Tour, vale la pena. De haber ido con una o dos horas más yo lo hacia…

– No perderse el Puente de los Suspiros, en mi opinión, lo más interesante si se piensa en su significado.

– Llevar un paraguas por si llueve… así no tenés que comprar y podés recorrer Venecia sin gastar un solo euro.

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